26 dic 2014

Renovacion madurista de poderes:triunfo pírrico, derrota política

 .-*La oportunidad perdida de tener un CNE legitimado por la oposición.
Con la caimanera que armaron, sus resultados y alcances, los chavismos acaban de perder, de desperdiciar, podría decirse; la oportunidad irrepetible de tener un sistema electoral al menos político-institucionalmente legal; y legitimante; el mismo actual incluso; pero armado con la participación y aval de al menos  una parte importante de la oposición. El CNE que terminará resultando de las designaciones del TSJ; no solo será igual, o el mismo; sino peor, será más ilegítimo que el actual. En éste, dos de sus cuatro rectoras chavistas fueron designadas con alguna participación formal de la sociedad civil; y hasta de la oposición, Y un rector no es chavista;  designado conjuntamente con ellas, y fue expresamente postulado como de oposición.
Ahora, estuvo a punto de darse la designación por mayoría calificada en la AN de un CNE apoyado por parlamentarios chavistas y no chavistas. Y, con cuatro rectores chavistas; dos nuevos designados ahora, y  con el quinto, de oposición. A pesar de todo; del partidismo y la ficción de las supuestas postulaciones por la sociedad civil, etcétera; iba a ser un CNE, en realidad, no nuevo, pero sí parcial y formalmente renovado. Y, sobre todo, legitimado  por la oposición o parte importante de ella.
Tal oportunidad, bastante más que hipotética, no se concretó; se frustró. Bien vistas las cosas, dada la estructura concreta, real, de la coyuntura política actual, de su dinámica; no era viable. Sucedió lo único que podía suceder; aunque se dieron una serie de condiciones, nuevas, que hubieran permitido otro resultado; no solo más deseable en general para el país y para las oposiciones; sino hasta óptimo para los mismos chavismos.
El supremo beneficiario de que hubiera un CNE más o menos creíble, avalado por parte de la oposición; cuyos resultados no se cuestionaran de entrada; era el chavismo, o, propiamente los chavismos en conjunto. Era la clave para lo que fuera; incluso en la perspectiva de insistir en el intento de lograr alguna variante de la “victoria perfecta” que se planteó Chávez a partir de su candidatura en el 2012. Y de la mejicanización de la política nacional implícita en al Plan de La Patria que fue su “programa de gobierno” de entonces y del que una versión, el Madurismo,(M). pretende implementar.

23 dic 2014

Hacia otro 2010

-* La AN del 2010 fue igual a la del 2005
El año próximo es 2015; habrá elecciones parlamentarias. Se elegirán nuevos diputados a una Asamblea Nacional, (AN), que sustituirá a la actual electa en el 2010.Tanto los chavismos como las oposiciones, se movilizan para armar sus fórmulas candidaturales; anticipando, cada quién,  que ganará. Y que, la nueva AN, según, “profundizará la revolución”; o, “creará las condiciones…”, etcétera, para salir de la crisis en que estamos.    
Para las oposiciones, en general, la AN que resulte de las elecciones del 2015, con una correlación político-partidista diferente; será la, base para la reconstrucción nacional. Lo que supone que  será diferente a la actual. Y, obviamente, a la anterior, electa en el 2005, con una participación solo de no más del 20% del electorado. En el 2010 la MUD llamó a votar masivamente para demostrar que el país mayoritario rechazaba el autoritarismo; que el instrumento para  salir de él sería la nueva AN;  la actual; que se constituiría como expresión de esa mayoría. Efectivamente, la gente votó masivamente. La abstención se redujo a un 40%. Se evidenció en la calle y las urnas, que, la mayoría de los venezolanos rechazaba al chavismo;  votando más por los candidatos de oposición que por los chavista. Sin embargo de lo que la AN resultó mayoritariamente chavista
No hace falta detallar qué y cómo pasó. Es bien sabido. El CNE-SMARTMATIC, re-territorializó la administración del fraude; mediante lo que, con más del 50% votos contra el chavismo, resultó una AN 60% chavista. Pero si vale destacar que con una fracción de oposición que resultó de más del  40%; un porciento que en cualquier contexto sería determinante; la actual, no fue diferente ni mejor ni significó avance ni cambio alguno; comparativamente con la anterior de 100%. parlamentarios chavistas. Y, no solo que con esa asamblea nueva no hubo avance  desde el 2010; en ningún plano de la vida y realidad nacionales. Sino que por el contrario, la crisis general se profundizó y redimensionó imparable; hasta el punto de que el rechazo nacional al régimen chavista, hoy chavista-madurista, es absoluto; mayor al de entonces; hasta en las mismas bases chavistas. A pesar de lo que los parlamentarios de oposición son ignorados, acosados y despojados  a discreción de su fueros por la burocracia parlamentaria oficialista.